
Recuperar un archivo de Excel no guardado o cerrado inesperadamente puede ser posible utilizando varias funciones integradas en Microsoft Excel. Aquí te presento algunas estrategias que puedes intentar:
- Recuperación Automática (Autorecuperación):
- Excel tiene una función de Autorecuperación que guarda automáticamente copias de tus archivos abiertos a intervalos regulares. Para encontrar estos archivos:
1. Abre Excel y ve a «Archivo».
2. Selecciona «Abrir».
3. Haz clic en «Documentos Recientes».
4. En la parte inferior de la ventana, selecciona «Recuperar libros no guardados».
- Carpeta de Archivos Temporales:
- Los archivos temporales pueden contener versiones guardadas automáticamente de tu archivo de Excel. Para buscarlos:
1. Abre el Explorador de Archivos.
2. Navega a `%appdata%MicrosoftExcel`.
3. Busca archivos con extensiones como `.tmp` o archivos que comiencen con el símbolo `~`.
- Verificar el Panel de Recuperación de Documentos:
- Si Excel se cierra inesperadamente, al reiniciarlo debería aparecer el «Panel de Recuperación de Documentos», mostrando cualquier archivo que puedes intentar recuperar.
- Uso de Versiones Anteriores:
- Si has guardado el archivo previamente, pero lo cerraste sin guardar cambios recientes, puedes intentar recuperar una versión anterior.
1. Haz clic derecho en el archivo original (si existe).
2. Selecciona «Restaurar versiones anteriores».
3. Escoge la versión deseada y selecciona «Restaurar».
- Buscar en la Papelera de Reciclaje:
- Si accidentalmente borraste el archivo, verifica la Papelera de Reciclaje para ver si aún se encuentra allí y puedes restaurarlo.
Para evitar pérdidas de datos en el futuro, configura el Autoguardado y la Autorecuperación:
- Ve a «Archivo» > «Opciones» > «Guardar» y asegúrate de que las opciones «Guardar información de Autorrecuperación cada X minutos» y «Conservar la última versión autoguardada si cierro sin guardar» estén habilitadas.
Si ninguno de estos métodos funciona, puede ser complicado recuperar el archivo, especialmente si nunca se guardó. En tales casos, contar con una política de copias de seguridad regulares es una buena práctica preventiva.
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